25 de noviembre de 2010

Nos separamos donde convergemos

El gran vacio que se siente cuando ya no estas aqui susurrandome al oido me obliga a enroscarme en el submundo al cual suelo recurrir cuando la soledad se vuelve mi enemiga. Siento ganas innecesarias de abrazarte fuerte a mi cintura y pedirte que te quedes una noche mas a mi lado, ganas de decirte entre besos que esto es mas que el simple deseo, confesarte que por las noches es tu voz la que me arrulla y me hace tener los mas dulces sueños (y si! tu voz es demasiado sexy).
Mi mente te encuentra totalmente dispensable, pero a veces el corazon te hace jugadas que hacen de tu existencia en ilusion indispensable; necesito desesperadamente volver a tenerte a mi lado, jugar a que somos dos enamorados que se cogen de la mano y el viento cae sobre sus rostros sonrientes, mirar juntos el atardecer mientras no dejamos de suspirar tras oler el aroma dulce que emana de nosotros (FEROMONAS ja!)
Luego abro mis ojos, y veo un mensaje en una ventana diciendome que luego de mi "compañia situacional" (jaaa! esas palabras son TOO MUCH) la soledad se vuelve vacia, encuentro a alguien que me dice cosas que no comprendo por mas que las lea dos veces pero que en el fondo tienen buenas intenciones; encuentro a ese alguien que mi subconciente a escondidas busca por las noches para abrazar y no dejarlo respirar (asi como un peluchito ^^,) ... y vuelvo a sonreir! Gracias por recordarme que la vida tiene su parte bonita, y que no es del todo mal sentir, huh?
Y vuelvo a ti, con indiferencia tal y como has tratado a este pobre corazon ilusionado, vuelvo solo para decirte que esta vez no sera como las anteriores porque esta vez soy yo quien te desecha, au revoir mon amour...pas á bientôt!

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